
Tratamientos caseros y fáciles para reducir los poros de la piel
1. Bicarbonato de sodio:
- Mezcla dos cucharadas de bicarbonato de sodio, con dos cucharadas de agua pura hasta obtener una pasta homogénea.
- Aplica sobre la zona afectada y deja actuar por 15 minutos. Generalmente, los lugares más frecuentes son nariz, mentón y frente.
- La pasta deberá secarse, ya que el agua se evaporará. En ese momento enjuaga con abundante agua fría.
2. Pepino y agua de rosas:
- Toma un pepino maduro y pélalo muy bien.
- Con un tenedor o mortero, machaca bien su pulpa hasta obtener una pasta.
- Añade una cucharada de agua de rosas y media cucharadita de jugo de limón recién exprimido. Mezcla bien para integrar.
- Toma un paño limpio y esparce la mezcla.
- Finalmente, apoya el paño sobre la zona a tratar y deja actuar durante 20 minutos.
- Enjuaga con agua fría. Repite dos veces a la semana.
3. Huevo y limón:
- Utiliza las claras de dos huevos y mézclalas con dos cucharadas de zumo de limón natural.
- Bate hasta formar una crema, que luego será utilizada como mascarilla para la reducción de poros.
- Con un cepillo, aplica directamente sobre todo el rostro. Evita la circunferencia de ojos y boca.
- Deja actuar hasta que notes la máscara tensa y seca.
- Lava con abundante agua fría.
4. Tomate y limón:
Este preparado para reducir los poros, también funciona muy bien para quitar el exceso de grasa de la piel. Si repites este tratamiento unas dos veces a la semana, en poco tiempo conseguirás pasar de piel grasa a piel normal. También puede utilizarlo cuando necesites una loción astringente natural.
- Mezcla 50 ml de jugo de tomates (sin semillas, ni piel) con 5 gotas de zumo de limón.
- Bate muy bien los ingredientes y embebe un trozo de algodón en la preparación.
- Aplica directamente sobre la zona afectada dando pequeños masajes circulares.
- Deja la bola de algodón sobre la piel durante 15 minutos.
- Enjuaga con agua fría.
5. Almendras y limón:
- Antes de dormir, llena la mitad de una taza pequeña con almendras. Cúbrelas con un poco de agua y déjalas durante toda la noche.
- A la mañana siguiente, machaca las almendras remojadas junto con el agua, hasta formar una pasta homogénea.
- Añade una cucharadita de limón.
- Aplica la pasta por todo el rostro, a modo de mascarilla. Deja actuar por 30 minutos.
- Lavar con agua fría.
Durante el uso de estos tratamientos, recuerda no utilizar paños ni agua caliente, ya que la temperatura elevada ayuda a dilatar los poros aún más. Lo ideal es utilizar agua templada a fría.
Con información de: Medicinanatural.com
Fuente: vidaverdeweb.com